Consideramos necesario testimoniar de modo profético los valores del Evangelio y algunos de ellos de modo prioritario frente a los retos del contexto latinoamericano.
Nuestras instituciones promueven un pensamiento alternativo al hoy dominante con diversas estrategias y, entre ellas, una educación en valores que permita arraigarlos y responder activamente, oponiéndose a las corrientes e ideologías que deshumanizan, marginan en la pobreza a las mayorías, fomentan el secularismo radical y alienan mediante las lógicas del mercado y del consumismo.
Nuestra educación promueve prioritariamente los siguientes valores:
- Amor, en un mundo egoista e indiferente.
- Justicia, frente a tantas formas de injusticia y exclusión.
- Paz, en oposición a ia violencia.
- Honestidad, frente a la corrupción.
- Solidaridad, en contradicción ai individualismo y a ia competencia.
- Sobriedad, en antagonismo ante una sociedad basada en el consumismo.
- Contemplación y gratuidad, en contraste al pragmatismo y al utilitarismo.